lunes, 8 de marzo de 2010

Sin palabras

Yo ahí de pie esperando, ella como un ángel, destilando belleza, pero no una belleza común, era una belleza tan intensa que la ropa que portaba no importaba, pudo haber traído encima un costal de papas y aún así no importaría, de esa belleza brumosa que hace que cualquier vestido parezca como si solo estuvieras cubierto de nubes, en fin, en mi interior, buscaba un referente, un punto de distracción para no caer desmayado, el aire me faltaba, las piernas, bueno, terrible, mis rodillas parecían de flan, y ella, impávida, hermosa, pasaron unos segundos, las últimas notas de la pavana de Ravel aún flotaban en el aire, camino hacia mí, me tomo de la mano y me miró, por un momento me sentí desnudo, mi alma estaba expuesta y solo ella era su dueña, oí una voz, pero... no comprendí nada, de pronto preguntaron, chispa aceptas? ella musitó un dulce SI, luego preguntaron sitevienen aceptas? yo dije SI, bien dijo la Juez, les presente a la familia F. G.

Y la vida cobró un nuevo sentido, aún no puedo creerlo, es algo que vale la pena vivir o mejor dicho es algo que hace que la vida valga la pena


Pudiste haber llegado diez años antes o diez años después, sin embargo llegaste en el momento indicado...

4 comentarios:

  1. ¡FELICIDADES!
    ¡Chale! ¿Y cómo es qué tienes tiempo para postear? ¿Acaso no hubo luna de miel? Será que fue la del civil, nada más.
    Mejor me voy a chambear.

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  2. Pherr(it)o...no nos importa. En esta vida hay tiempo para los instantes de felicidad. Yo por eso lo quiero a usted, sus pies en la tierra me devuelven a este sitio.
    Dn. Librero. Todos mis parabienes. Todo lo mejor y feliz retorno.

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  3. Felicidades, que la felicidad perdure siempre en su nuevo hogar y que los niños no los dejen dormir...

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  4. O sea, ¿tienes una semana de casado?, pues FELICIDADES.

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